Gran Premio Omnilife 2001. Indiferente a la crisis actual

Replica21

Ramón Almela

Jose VelazquezJosé Velázquez "Cabina 7"

Valorar el uso de un material o la realización de una técnica no es enjuiciar adecuadamente la producción del arte. Lo que llamamos arte proviene, a través de toda una serie de transformaciones, del concepto griego de “téchne” que los latinos tradujeron como “ars”.

El lenguaje ha equiparado técnica con arte, al menos en el sentido de la producción artesanal. La afirmación “Es un artista” además de la referencia a la fábula del artista como figura con talento y aura especial para la creación de imágenes (ver “La imagen del artista actual, snobismo y enigma” en critic@rte Abril del 2002), conlleva la acepción lingüística de “el que hace algo a la perfección”, el que tiene una destreza para realizar una cosa. Si bien hoy en día el productor de arte puede aparecer y mostrarse como insuperable dominador de una técnica en la manera artesanal, su aportación a nivel artístico no radica en esa área.

Las obras premiadas en el Salón de Octubre del Gran Premio Omnilife 2001 en las disciplinas de Pintura, Gráfica, Fotografía, Escultura e Instalación se exponen hasta el 8 de Marzo, 2003 en la Galería de la U. Iberoamericana. El número de participantes de la convocatoria de ese año superó la del anterior (ver “Fragmentación y Contraposición en Omnilife 2000” en critic@rte Febrero 2001) participando cerca de tres mil obras. Un concurso de envergadura nacional supondría tener como principal objetivo distinguir aportaciones de creación original, y no tan sólo hacer destacar la mejor obra realizada. Dentro del jurado colisionó la apreciación de la técnica con la apreciación creativa y ocurre a menudo que una excelente técnica no acompasa al valor creativo, apartándose de éste en muchas obras.

Rosa RoblesRosa Robles "Toilette"

El jurado fue compuesto por Sylvia Pandolfi, directora de museos, Aníbal Angulo, maestro de grabado en la UNAM, Patricia Mendoza, Historiadora de Arte de la UIA-Ciudad de México y Luis Lama, presidente de la Bienal Iberoamericana de Luna. La capacidad de lectura del jurado resulta mermada ante la ingente cantidad de piezas que se tuvieron que revisar desde diapositivas. Por fiel que la reproducción de la imagen sea, pierde siempre la autenticidad de la transmisión directa de la pieza, su tamaño y su cualidad material. Además, media entre el jurado y la imagen proyectada los estereotipos formados en la percepción de los propios miembros del jurado. La captación de la fotografía es siempre una interpretación inconsciente del espectador que depende de sus valores y creencias. Uno percibe lo que quiere ver o lo que está preparado a ver.

Así que en esta amplitud de posibilidades de interpretación junto al cansancio visual acumulado en el que el cerebro saturado ya no distingue… se comprende que llegar a apreciar y distinguir la obra valiosa de la común se reduce considerablemente. Tuvieron que seleccionar primero un 10%, unas 300 obras, seleccionando después 100 de ellas, de las cuales quedaron premiadas 36 que se pueden contemplar en la Galería de la Universidad Iberoamericana.

También podría ocurrir que muchas piezas presentadas necesitarían mayor conocimiento del contexto para ser adecuadamente comprendidas ¿Cuántas propuestas con un fuerte contenido documental y teórico expuestas en la Documenta XI de Kassel o en la Bienal de Venecia habrían pasado inadvertidas en un concurso de 2,665 obras sometiéndose a esa agotadora revisión?

Aurora Noreña Aurora Noreña "Sin Título"Sergio GarciaSergio García "Ensalada"

Contemplando las obras de pintura, el contexto general de la exposición resulta defraudador. En la pintura y el grabado de esta muestra impera el orden estético. El jurado se ha inclinado por lo convencional contemporáneo. Los cuadros, esas superficies que revelan una imagen creada, no sorprenden ni inquietan. En ellos se aprecia una glorificación de la banalidad y lo cotidiano en consonancia con el espíritu dominante en la actualidad. La representación de un interior, la extensión de una toalla en la playa, unas personas fumando, o un personaje en caricaturadas proporciones son acciones cotidianas pintadas con tratamientos ya exhaustos, así como la pieza “Exiliado de la tierra” de Francisco Huazo donde la acumulación matérica por capas con una serie de trazados figurativos acertados crea una sugerente superficie neo-expresionista. El caminar por la rotonda ascendente de la galería se vuelve un paseo por lo conocido y explorado, realizado excelentemente, en una congruencia de la intención con los materiales –no en vano han sido premiadas- , pero falta eso que conmueve. En el concurso no se presta atención a los caminos con propuestas más frescas por los que el arte se encauza en la actualidad. De todas formas, hay piezas destacables como la de Alberto Ibáñez “Arcos del Triunfo” o la de Sergio García “Ensalada” que contienen además de la excelencia técnica una sugerente provocación de significados.

También se percibe en las obras de grabado esta tendencia del renovado uso de materiales artesanales convencionales en la producción de la imagen, pero las obras son mucho más interesantes que las de pintura como la xilografía de gran tamaño de Pedro Ascenciro “Las noches han dado vuelco a su suerte”. Y es en la fotografía donde cabe mencionar el despegue de lo habitual enfatizando la valoración documental, el retrato que revela lo singular de los personajes desde su simplicidad, y lo cotidiano expuesto sin ambigüedad. Elementos que operan con fuerza en el campo del significado. Estrategias de la imagen como portadora de una comunicación accesible.

Pero sin duda, lo que resulta reconfortante en esta muestra es el encuentro con las obras tridimensionales. El conjunto de todas las piezas premiadas es muy positivo. En esta ocasión el jurado decidió, además, reclasificar el género bajo el cual algunos de los artistas presentaron su obra. La demarcación entre los terrenos de la escultura y la instalación no aparecen nada delimitados. La fusión de los géneros ha creado esta confusión en la que los artistas o el jurado no aclaran la diferencia entre la escultura y la instalación. Así que para aliviar el gran número de participantes en escultura, reclasificaron como instalación propuestas presentadas en escultura. Tengo la impresión que la intención corporativa de coleccionismo que el jurado respaldaba ha llevado a desechar propuestas de instalación complejas dando prioridad a las concretas acumulaciones objetuales. Y es que las ideas no son
premiables en un concurso.

Alberto Ibañez Alberto Ibañez "Arcos del Triunfo"

Jorge Ramirez Jorge Ramírez "Telefonía Móvil"

Pedro Ascencio Pedro Ascencio "La Noches han dado vuelco a su suerte".

Muchas de las piezas tridimensionales son excelentes y se percibirían mejor en un espacio adecuado. Una instalación de lavabos de metal “Toilette”en una discordante mezcla con patas de avestruz de Rosa M. Robles recibe al visitante de la galería próxima a la pieza de Laura Akemi “El respirar de las rocas”. Junto a estos, la “Hipérbole monosilábica” de Ricardo Caballero y la “Telefonía Móvil” de Jorge Ramírez destacan con la estrategia de encuentro de materiales o el choque entre lo funcional y lo obsoleto como recurso creativo aportando dimensiones de riqueza emocional y significativas. El choque y la dualidad se establecen también en la disociación sobre el muro de los bustos masculino y femenino de José Velázquez con “Cabina 7” y la excelente obra de una inmaculada página abierta por cremallera de Aurora Noreña. Y lo banal alcanza también su representación en la instalación a través de unos calcetines enfundados “En el camino” de Claudia López y lo cotidiano de un sillón con aire de volutas de un capitel jónico “Escultura doméstica” de Ángel Ricardo.

El conjunto de obras en la edición de este certamen predomina por el manejo de técnicas usuales en la pintura, el ensamblaje como instalación, y lo documental y retratista en la fotografía. ¿Es esto un volverse indiferente a la crisis que el arte actual atraviesa y replegarse a terrenos conocidos?

Pedro Tzontemoc Pedro Tzontemoc "Rebelando a Ulises II"

Diego Perez Diego Pérez "Lorena, Adriana y Esteban"

Este artículo, también puede encontrarse en la dirección de critic@rte en internet: www.criticarte.com

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Fecha de publicación: 10.04.2003